Levante la mano quien no tenga problemas, quien no sufra de estrés, a quién siempre todo le salga bien. Según mi experiencia, a estas alturas no debe haber nadie con la mano levantada. Todos tenemos nuestra propia carga de preocupaciones y cosas por resolver, y por supuesto nos afectan los problemas del país y del mundo.
El asunto es que no vamos a resolver esos problemas si nos dejamos dominar por ellos.
¿Qué quiero decir con esto?, que si caemos en el desánimo, la apatía, la tristeza o cualquier otro estado de ánimo negativo, quedaremos indefensos. Para salir adelante debemos hacer un esfuerzo consciente por crear espacios para el bienestar, en donde podamos ser creativos, en los que nos enfoquemos en nuestras fortalezas y no en nuestras debilidades.
El humor conlleva flexibilidad, capacidad de jugar, creatividad, si nos manejamos en esta frecuencia tendremos mucha más energía para hacer lo haga falta en pro de cambiar aquello que queramos cambiar, o lograr los resultados que deseemos. Es sabido el efecto benéfico del humor en la salud, vinculado a la reducción del estrés y a la producción de endorfinas asociadas a la risa.
Compartir con amigos, ver películas cómicas, ir al teatro, jugar con los hijos, son fuentes de humor, debemos procurar disfrutar de ellas con frecuencia, aumentar los momentos de disfrute en nuestra vida de manera consiente, es decir propiciarlos y aprovecharlos.
Repito la palabra “consciente” porque a veces estamos tan enfocados en lo que no gusta que no nos damos cuenta de que se pasa el tiempo y no nos tomamos esos momentos para la recreación y la diversión. Incluso pensamos que lo haremos luego, cuando salgamos del rollo, que ahorita no estoy para eso que tengo muchos problemas, la verdad es que siempre vas a tener problemas, pero si haces algo para cambiar tu estado interior estarás en mejor disposición para afrontarlos.
Es sabido que el estado de ánimo de una persona determina su percepción del mundo, funciona como un filtro a través del cual se experimenta la realidad. Para hacer realidad sus sueños, las personas deben ser capaces de desarrollar y mantener estados creativos de conciencia. Hacer un compromiso con nosotros mismos y tomarnos el tiempo para desarrollar estos estados es vital.
Obviamente nuestras relaciones interpersonales mejoraran mucho si mantenemos el buen humor, se hará mas fácil el trabajar en equipo, el colaborar y recibir ayuda, y por supuesto la vida en pareja también se beneficia.
El poder reírnos de nosotros mismos también es algo muy valioso, no tomarnos tan en serio nos aliviara la presión que todos sufrimos al tratar de mantener estándares muy elevados. Si soy capaz de reírme de mí mismo me preocupa mucho menos lo que piensen los demás acerca de mí y aumenta mi autoestima. Si soy el primero en reír de mí mismo, los demás se reirán conmigo.
Entonces… ¿Nos reímos?
Humberto Segura
Coach de Bienestar
Twitter: @humbertosegura | e-mail: humbertosegura@hotmail.com
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